HOMEOSIS (GENES HOX)

HOMEOSIS (GENES HOX)



La célula es el elemento constitutivo y fundamental de todos los seres vivientes, su agrupación en los tejidos y órganos origina una multitud de estructuras que constituyen el proceso de formación y funcionamiento que se encuentra codificado en los genes. Estos son secuencias químicas del ADN que se encuentran empaquetados en los cromosomas y están alojados en el núcleo celular. los átomos concretos (carbono, hidrogeno, oxigeno y nitrogeno) componen la sustancia de los genes, el ADN.
Estos códigos son como vehículos de continuidad y reproducción desarrollados en la espiral helicoidal del ADN y son el resultado de una serie de proporciones geométricas fijas y abstractas análogas al desarrollo cósmico.

Se ha comprobado que los procesos básicos que gobiernan el desarrollo en diferentes grupos de seres vivos son los mismos, a pesar de la disparidad de diseños estructurales y modos de vida.

Los genes HOX son los que por mutación espontánea o por manipulación genética producen la transformación de un segmento en otro, a este fenómeno se lo denomina “homeosis”;
su expresión consiste en seleccionar la identidad de un grupo celular. Cada una de las proteínas HOX regula un conjunto distinto de genes encargados de convertir en hechos lo que ellos seleccionan, por ej., una pata para caminar o una antena para oler, razón por la cual lo genes HOX son denominados genes homeóticos,también llamados genes selectores.
Los genes HOX producen la transformación asombrosa de una antena en pata, dicha mutación tiene lugar en el gen homeotico Antennapedia (o antena como pata).
Un gen HOX humano podría sustituir a su equivalente de la mosca.

Estos genes actúan como interruptores principales, encendiendo y apagando otros genes durante su desarrollo embrionario y determinan el destino de cada célula en el embrión, asegurando que los órganos y el resto de partes del cuerpo se forman correctamente en el animal en el que se desarrollan.

Los genes HOX parecen haberse desarrollado bastante pronto en la historia de la vida en la tierra. Las plantas terrestres contienen homólogos de genes HOX, por lo que parece que un ancestral gen parecido al HOX existió en el ultimo antecesor común de plantas y animales, el cual era un organismo unicelular que vivió por lo menos hace 1200 millones de años.

Los HOX explicarían como ocurrieron las drásticas alteraciones de los esquemas corporales durante las primeras evoluciones de los animales.